Este puente, tradicionalmente, ha sido considerado de origen romano, sin embargo, algunos estudios han demostrado que, en realidad, fue construido en el siglo XVII. Prueba de ello es una inscripción grabada en la propia construcción.
Cruza este puente y disfruta del sonido del agua corriendo bajo tus pies, imagina los coches de caballos cargados de mercancía cruzándolo, aléjate un poco y consigue una magnífica foto con su ojo de fondo, rodeado de un paisaje único de nuestra hermosa villa extremeña, una de las bonitas huellas que nos ha dejado el paso de la historia.
El propósito del Puente de Abajo o de Piedra, situado al norte de la población que cruzan las aguas del arroyo Rivera de Avid, fue el de sustituir un puente anterior, de traza medieval que se cree fue destruido por una crecida del río a comienzos de ese mismo siglo.
A nivel de construcción, destaca el hecho de contar con un solo ojo y está reforzado por dos contrafuertes. Además, también cuenta con sillería de granito, lo que ha traído como consecuencia que sea localmente conocido como el “Puente de Piedra”, dándole así también nombre a la propia calle en la que se encuentra.