Antes convento, ahora muestra de la historia de la vida local

Estás en el Convento de Santa Clara de la Orden de Santa Ana, un lugar de encuentro con el pasado histórico de la Villa. Fundado durante la segunda mitad del siglo XVI, albergó la comunidad religiosa de monjas clarisas hasta su desamortización en el siglo XIX.

De la Iglesia de los Padres, destaca su fachada de estilo plateresco, columnas corintias y capiteles de orden compuesto. Portada de doble arco de medio punto con los medallones de San Pedro y San Pablo. Una hornacina con la efigie de Dios Padre y el Niño Dios, y a ambos lados los escudos de los linajes fundadores.

Y qué mejor sitio para conocer la cultura y costumbres valencianas que visitar el museo etnográfico, dentro del convento. Te adentrarás en la vida de sus antiguos vecinos; sus casas, los oficios que desempeñaban, sus tradiciones y aficiones; sin olvidar la escuela que este mismo edificio albergó y que cuenta con una sala temática. Recorre sus estancias y transpórtate a siglos pasados. Las fotografías te mostrarán la evolución en calles y edificios.

Si necesitas más información acude a la oficina de turismo, a la entrada del museo.

El conventual fue recuperado para el culto por los religiosos de la Comunidad de la Preciosa Sangre a comienzos del siglo XX y, actualmente, se llama Iglesia de los Padres. A finales de este mismo siglo, fue restaurado gracias a la colaboración de los vecinos y los servicios religiosos han sido retomados.

Actualmente, en el interior de este convento encontramos la Oficina de Turismo y el Museo Etnográfico, que fue inaugurado en 2008, situado concretamente en la galería alta del claustro del Convento. Este fue reformado en 1928, adaptando las celdas a las aulas del colegio que albergó hasta reconvertirse en el actual museo, que recorre la cultura, las tradiciones y la sociedad de Valencia de Alcántara de los dos últimos siglos de historia.

Así, cuenta con 8 salas principales, cada una con una temática diferente: un homenaje al antiguo colegio General Navarro y Alonso de Celada; la imprenta local, Imprenta Ávila; las fiestas tradicionales de la localidad, como “Los Mayos”, “La Cruz de Mayo” y San Isidro Labrador; la cocina tradicional y de matanza; los oficios antiguos de la vida rural; una simulación de un par de estancias de una casa de principios del siglo XX,; una muestra de afiches del Archivo Municipal y fotografías de la primera mitad del siglo XX; y, por último, una dedicada al cine, donde podemos ver materiales cedidos por el antiguo Cine Luis Rivera. En la actualidad, en los soportales del claustro, con acceso por el lateral del edificio, se encuentra la escuela infantil municipal.

¿Sabías que…?

  • La plaza que vemos junto al convento fue el antiguo huerto de las clarisas y posterior solar del Coso, lugar donde solían lidiarse los toros.
  • El Convento Santa Clara, antes de convertirse en escuela, fue cuartel, almacén, prisión y casa-cuna.
  • La esquina junto a la Iglesia de los Padres y la actual escuela infantil aún conserva un vestigio de las guerras acaecidas en la Villa, siendo visibles los destrozos de un cañonazo.